CAMBIOS DE CULTIVOS
La economía en la producción de agave por la región Ciénega
La Economía es una ciencia social, que se ocupa de estudiar el uso y la distribución de los recursos y bienes disponibles, con el fin de cubrir las necesidades de una población. Estudia el comportamiento, decisiones y acciones de las personas respecto a la producción, distribución y consumo.
En la actualidad las necesidades humanas han sido rebasadas por las comodidades que la modernización y el consumo irracional a creado en cada individuo. Los problemas económicos, sociales, alimentarios y ambientales, es principalmente causado por la especie humana, misma que se ha considerado la especie más inteligente y se colocó en la cúspide de la pirámide del reino animal, ¿realmente lo seremos?
Lo anterior es de suma importancia mencionarlo, para poder reflexionar en el tema de las grandes extensiones de superficie sembrada de agave que actualmente avanza a pasos agigantados en la región Ciénega de Jalisco; aunque el paisaje agavero es un deleite para cualquier mirada, el precio a pagar por esto podría ser muy alto.
Cada día se observa como desplaza a cultivos como maíz y trigo, granos básicos que necesita producir nuestro país y que al ser desplazados en una región que es reconocida por su gran aportación de estos granos a nivel nacional, provocará un efecto dominó en otros sectores, y lo más importante, ambos granos han sostenido a miles de familias de la región; la derrama económica que el maíz y trigo dejan a permitido que exista fuentes de empleo de forma directa e indirecta.
Si reflexionamos sobre el impacto social, económico y la huella ambiental que conlleva un cultivo que explota los recursos naturales, es preocupante pensar en el futuro cercano de la región. El cultivo de agave, ha llevado a la zona Ciénega al exceso de desmonte y desplazamiento de otros importantes en la región.
Sin embargo, en una sociedad con evidentes necesidades básicas, familias con ingresos que no cubren la canasta básica, el incremento de precios en los agroinsumos para la producción de maíz y trigo, incertidumbre en la comercialización para la mayoría de los productores, inconsistencia de políticas públicas hacia el sector productivo, son razones de lo que ocurre y describo, entre otras muchas cosas.
Con lo anterior, podemos entender un poco, por qué los dueños de tierras, ya sea que las renten a productores de maíz y/o trigo, o el mismo dueño sea el productor, sea tentado a rentar sus parcelas o desmonte para la siembra de agave a cambio de pagos que duplican o triplican lo que pudieran recibir por la renta para la siembra de maíz y/o trigo de su tierra o de la venta de su cosecha. Si hiciéramos un profundo análisis, cual fue el motivo por el que decide rentar y no seguir produciendo, es debido a que esta le deja un ingreso neto, sin riesgos climatológicos, sin problemas de precios altos en los insumos e incertidumbre en la comercialización.
La gran demanda de superficie para el cultivo del agave y sin una política de regulación de siembra de este cultivo, provocara grandes daños ambientales, sociales, económicos y alimentarios, no solo en la región, sino a nivel país. ¿Dónde queda la seguridad alimentaria? Este tema no es político, es un tema que nos involucra a todos, ¿qué pasará con tus hijos, que suelo les dejaras? ¿Qué le dejaremos a las generaciones futuras?
De acuerdo a los foros agroalimentarios que anualmente realiza el Consejo Nacional Agropecuario, es urgente producir de manera sustentable y sostenible, debemos de hacer conciencia de cuidar el lugar donde vivimos, que es este planeta llamado tierra.
Desde mi óptica como economista y principalmente como un ser humano que habita en esta casa llamada tierra, los recursos de producción son escasos y debemos ser conscientes en su uso; el suelo es un ser vivo como cualquiera de nosotros, produce alimentos para todos y está siendo erosionado sin que nadie haga nada por él, es urgente que la sociedad sea más consiente, más empática con los recursos naturales, urgen de políticas públicas que regulen los cultivos que degradan más el suelo y que no son parte de la canasta básica como es el cultivo del Agave.
Desde tu trinchera, ¿qué estás haciendo por el suelo que produce tus alimentos?
La reflexión de Eloísa Serrano Briceño. – Economista Agrícola por la Universidad Autónoma Chapingo y gerente de la Integradora Agrícola Arca